Tenemos que vernos más, ese es el mensaje que nos envía este viral spot publicitario de Ruavieja. El uso sin límite de la tecnología, la deshumanización de las relaciones sociales y los términos lenguaje y comunicación son los temas que trataremos hoy.
En primer lugar, debemos de trasladarnos a lo más antropológico, exponiendo que el ser humano posee la capacidad innata de relacionarse y, lo que es más importante, la necesidad primaria de ejercerla. El humano no puede vivir sin otras personas, aún menos cuando se trata de nuestros seres queridos.
El concepto se ha bifurcado por pensamientos individualistas, estrés y falta de tiempo, eligiendo la comodidad y seguridad que nos prestan las múltiples pantallas negras donde nos sumergimos cada día.
En definitiva, el uso de las nuevas tecnologías, junto a una dependencia excesiva de las mismas para comunicarnos, han limitado el tiempo que pasamos con nuestros seres queridos, pero ¿realmente nos produce mayor felicidad las “ventajas” que nos ofrecen están tecnologías? Probablemente no, pero no somos capaces de percibirlo, creyendo que nuestro tiempo es ilimitado y podremos recuperarlo con esas personas que, en este momento, las vemos 1 o 2 veces al año. No ser capaz de plantearse el hecho de que nuestra vida se acabará, nos lleva a pensar en el mañana para aplazar todo lo que, en el fondo, más deseamos hacer. Vivimos sin tiempo y no nos damos cuenta, alardeamos del carpe diem mientras nuestro tempus fugit
El daño colateral que produce no comunicarnos personalmente, sustituyéndolo por móviles y ordenadores, no solo causa nuestro distanciamiento con nuestros seres queridos, también ocurre con el resto del mundo, olvidando que el lenguaje y la comunicación es la llave de la integración social.
La idea que se plantea en el spot “Tenemos que vernos más”, concluye perfectamente, planteando, mediante cálculos y estadística, el tiempo que nos queda por pasar con esa persona querida. En cierto modo necesitamos esos límites, en este caso temporales, como si se tratase de una fecha a la que atenernos, que nos tuerza la mirada y realmente nos haga descubrir en qué medida necesitamos algo o a alguien.
En Juridiomas facilitamos los procesos de comunicación y asimilación de contenido en diferentes idiomas, con el objetivo de que sean universales y empleados en la vida real, humanizando los mismos, al contrario que los programas traductores de móviles u ordenadores. Está en tus manos quedarte en la pantalla o ir más allá. No te limites.