¿Te has preguntado alguna vez qué ocurre en las agencias de traducción cuando se corrige un texto? ¿Hay algún truco que debas conocer?
En primer lugar, las agencias recomiendan una relectura minuciosa, lo que puede parecer obvio, pero que es muy importante. Luego, cuando tenemos que corregir algo, nos aseguramos de explicar por qué estamos haciendo este cambio. Si es una regla de gramática, un vocabulario inadecuado, etc. Es importante que el cliente o la persona que va a releer el trabajo sepa cuál es el problema y lo entienda. Así que se introduce en la corrección un justificante.
Luego, al final del texto puedes escribir un breve resumen sobre la calidad de la traducción que permita a otros compañeros de la agencia entender el trabajo que has realizado. Esto no es muy útil para el cliente, pero muestra tu seriedad y el lado más profesional de la agencia.
La ventaja de corregir textos escritos y/o traducidos por otros te permitirá aprender nuevos trucos. Es una buena manera de evitar la repetición porque todos tenemos nuestro propio estilo de escritura o traducción. Siempre es interesante leerlos para mejorar o aprender nuevas expresiones.
Además, cuando se corrige un texto, es más fácil ver los errores si se lee en voz alta. A veces las frases son demasiado largas y cuando las lees no puedes recuperar el aliento correctamente, así que sabes que tienes que añadir una coma o cortar la frase en varias.
Además, por si no lo sabías, las agencias recurren a traductores especializados cuando el texto contiene vocabulario especializado en un ámbito concreto, por ejemplo, médico, jurídico, financiero, etc. Así que puedes confiar en ellos si tus textos tienen un tema concreto.