Un poder notarial es un documento público por el que una persona o empresa nombra a otra persona como su representante legal para que ejecute distintos actos jurídicos en su nombre.
Aquel que delega en la otra persona se llama poderdante y el que recibe los poderes, apoderado/representante. Éste último deberá acreditar su capacidad como apoderado mostrando la copia autorizada del poder cuando tenga que ejecutar los actos jurídicos para los que lo nombraron representante.
El poderdante puede en cualquier momento recovar el poder notarial, solicitándole al representante que le devuelva la copia autorizada del poder. Si éste se niega a entregarla, se debe otorgar una escritura de revocación de poder y notificársela al representante a través de un notario, que puede ser otro distinto con el que se hiciera el poder.
¿Quién puede realizar un poder notarial?
Lo puede hacer cualquier persona mayor de edad que esté en plena posesión de sus facultades mentales. Es un documento público tan frecuente en España que se llegan a realizar más de 1.000.000 de poderes notariales al año. Eso sí, no todos son iguales, los hay de muy distintos tipos dependiendo de las facultades que se presenten otorgar. Es muy importante explicar claramente al notario por qué y para qué se desea realizarlo para su correcta elaboración. Sin embargo, se pueden agrupar en dos grandes grupos; los poderes generales y los especiales.
Poderes generales
Son aquellos en los que el apoderado recibe las facultades de actuación en todos o en varios ámbitos de forma general. Este modelo es el que concede al apoderado de más facultades para actuar. Dentro de este grupo destacan el poder para pleitos, que es el más utilizado por los españoles y el poder para disposición de bienes.
Poderes especiales
Como su nombre indica, son aquellos que confieren las facultades necesarias al apoderado para un determinado acto jurídico.
Apostilla de la Haya
Los poderes notariales de España tienen reconocimiento internacional. La Apostilla de la Haya permite que se reconozca la eficacia jurídica de un poder entre países firmantes de este Convenio de la Haya del 5 de octubre de 1961. La apostilla se inserta en el documento público notarial de forma que certifica la autenticidad de los documentos públicos expedidos en otro país. La Apostilla no es necesaria en todos los casos aunque el poder notarial se vaya a usar en otro país.
Traducción jurada de poderes notariales
La mayoría de los poderes notariales que recibimos son para traducción al inglés o están en inglés y hay que traducirlos al español. En ambos casos se debe realizar una traducción jurada del poder notarial para que tengan efecto legal en el otro país, de lo contrario se pierde su valor. Son documentos que por lo general entrañan ciertos datos muy privados. En Juridiomas Traductores los tratamos con la mayor confidencialidad, lo que aquí se lee y traduce aquí se queda. Si no se llega a realizar el encargo automáticamente se destruye la copia que nos hayan hecho llegar, la cual es imprescindible para saber el coste de la traducción de un poder notarial, pues varían en número de palabras y páginas notablemente.
Power of Attorney o Letter of Attorney
Éste es el nombre que reciben los poderes notariales en inglés. El que otorga los poderes a otra persona es el grantor, principal o donor. Y el que los recibe es el agent, attorney-in-fact o attorney. La terminología variará dependiendo del país o estado de los Estados Unidos de América donde se haya formulado el poder notarial.
Notarios
Un notario es la figura clave para que el poder notarial tenga efecto, pues ante él se formula el documento público notarial y se realizan las firmas oportunas. Es muy sencillo la contratación de sus servicios, solamente hay que elegir la notaría a la que se quiera acudir e informar sobre lo que se pretende realizar. Os explicarán claramente el procedimiento a seguir y el coste por dicho servicio.