Por fin has abierto los ojos y cuando tu competencia lleva años vendiendo más allá de nuestras fronteras, ahora caes en la cuenta de que tu empresa también puede hacerlo. Enhorabuena, ya se sabe que más vale tarde que nunca.
Antes de nada, acude a la cámara de comercio de tu ciudad, allí te asesorarán y resolverán muchas de las dudas que ahora se te platean y te informarán sobre los pasos a seguir.
Si vas a vender en el extranjero debes hacerlo bien desde el principio, sino todo el esfuerzo que inviertas resultará en fracaso.
Si ya tienes focalizado el país de tus futuros clientes, lo principal es contar con alguien en tu empresa que domine el idioma de ellos y que tenga estudios y/o experiencia en exportación. Automáticamente todo lo que tienes redactado en español sobre tus productos y tu empresa debe estarlo también en el idioma del país donde quieres vender, pasando por página web, folletos, catálogos… todo.
¿Te verías más interesado en comprar una cámara de fotos cuyas instrucciones vienen en español o una en las que viene en un idioma que desconoces?
Como primera toma de contacto puedes tener tu propio stand en una feria internacional o participar en alguna misión comercial de las que organizan las cámaras de comercio. Si por otra parte, os veis lo suficientemente sueltos como para contactar directamente con clientes potenciales, podéis haceros con vuestra propia agenda de clientes para visitar.
Contad con Juridiomas Traductores en lo que podamos ayudaros y ¡suerte en vuestra nueva andadura!! Merecerá la pena.