¿Necesitas una traducción urgente? Piensalo de nuevo, ¿es realmente tan urgente?
A menudo nos encontramos con clientes que acuden a nosotros apresurados porque se les acaba el tiempo de entrega de sus traducciones juradas, porque se marchan al extranjero en un plis-plas o porque simplemente quieren tener su traducción cuanto antes.
Debiendo a esta situación los traductores nos vemos en la obligación de ir realizando los encargos según van llegando, ya que nos es difícil discernir de una urgencia real y una un tanto ficticia. Aunque siempre vamos haciendo excepciones porque creemos en las personas.
Sin embargo, nos suele ocurrir que volamos para tener una traducción en el plazo que se nos pide y que luego el cliente tarda más de lo que nos dijo en recogerla, tiempo que nos habría venido genial para ir con mayor tranquilidad.
Pensamos que esto ocurre porque somos mal pensados (vamos a incluirnos), y que si estamos a lunes y la necesitamos para el viernes, mejor vamos a decir el miércoles para así curarnos en salud y que la traducción esté lista.
Lo que ocurre es que si a un traductor le dices un miércoles, tratará de tenerla el martes o trabajará con una presión mucho mayor que si sabe que la fecha real es el viernes y calcula para tenerla el jueves lo más tardar.
Esto puede hacer que no podamos atender a otro cliente que quizás sí que tiene una urgencia real o que por ir demasiado deprisa cometamos un error que no hemos advertido por poco tiempo en la revisión. Siempre se ha dicho que las prisas no son buenas, ¿verdad?
Desde la universidad ya nos avisaron. Vais a trabajar bajo estrés toda la vida, y así nos entrenaban con continuos encargos que debían estar listos al día siguiente. ¡Y qué razón llevaban!
En nuestra defensa debemos decir que somos un sector que no fallamos en el plazo que hemos acordado, hemos sido altamente entrenados para cumplir lo pactado. Suena a broma, pero es real. Es difícil de creer porque compras unos muebles y no suelen llegar cuando esperabas, vas al dentista y raro es que entres a la hora a la que tienes la cita… impuntualidades que me imagino que son las que hacen que lleguéis temerosos pensando que la traducción que tanto necesitáis no estará lista a tiempo.
Con nosotros podéis estar tranquilos de que la tendréis en la fecha acordada. Además, en Juridiomas no cobramos por urgencia, si no que somos realistas, y si vemos que un trabajo no va a llevar la calidad que ofrecemos debido a su urgencia, no lo aceptamos.
Os pedimos comprensión, de verdad, traducir algo lleva más tiempo del que podáis creer. Es un trabajo muy mental y la cabeza necesita descansos porque si no la visión ya se confunde. Está claro que no se tarda dos días ni cuatro en hacer un documento de 200 palabras, por ejemplo, pero si se da un plazo superior al que esperabais es por algo.
Por nuestra parte nos esforzaremos para atenderos a todos con la mayor rapidez posible. Confía en que tu traducción estará a tiempo, vamos a acordar la entrega juntos.
Y recuerda que no importa que busques a un traductor jurado en Granada, un traductor de inglés en Alcalá de Henares, un traductor jurado de alemán en Fuengirola o que estés residiendo en Londres o en Italia. La rapidez de entrega prácticamente es la misma que si ambos estuviésemos en la misma ciudad.